Disminuir texto
Publicado por alvarhillo
En la partida de Plá Oliveres (Sant Vicent del Raspeig), más conocida actualmente como "Pozo de San Antonio", se haya una pequeña joya desconocida: la Ermita del Carmen.
Desde hace aproximadamente un año que empecé a montar en bicicleta, paso muy a menudo por el carril bici que discurre por lo que era antaño la carretera de Castalla. Siempre me sorprende ver en la lejanía una pequeña ermita que parece trasplantada de alguna isla griega en medio de la árida llanura alicantina (o "sanvicentera" que viene a ser lo mismo)
Guiado por la curiosidad, decidí investigar un día sobre ella y pregunté en el Ayuntamiento. En la Concejalía de Cultura me pusieron en contacto con Agustín, un jóven que pertenece a la Asociación de Vecinos del Pozo de San Antonio, que amablemente me abrió las puertas de la iglesia y me contó algunos detalles de la misma.
La ermita data del siglo XVIII. En el libro de visitas pastorales de José Montesinos, de 1795, ya aparece entre las ermitas que el obispo de Orihuela, D. Juan Elías Gómez de Terán, visitó en 1753.
De propiedad particular de la familia Pastor, se levantó a orrillas del antiguo camino de postas que conducía a la Foia de Castalla y, por ende, a Alcoy.
Está consagrada, como habréis podido adivinar, a la Virgen del Carmen, y se encuentra próxima a la llamada "Casa Blanca", una singular construcción coronada con una torre semicircular que al parecer fué el antiguo aposento de los alguaciles que vigilaban el camino.
La ermita albergó celebraciones privadas de la familia Pastor (bautizos, bodas, sepélios...) y sobre todo una romería, que aún hoy se celebra todos los 16 de Julio organizada por la AAVV colonos del "Pozo de San Antonio"
La ermita fué incendiada durante la Guerra Civil. Reconstruida en 1941, fué reformada en 1985 y 2003.
Aunque, viendo el lamentable estado en que se encuentra debido a las filtraciones de agua y a la humedad, requeriría una restauración a fondo. Pero, al parecer, el hecho de ser propiedad particular hace que el Ayuntamiento se desentienda del tema.
Una pena..., por que aunque no sea ninguna maravilla arquitectónica, es un trocito de nuestro pasado que sería una pena perder.
