10 junio 2007

GASTÓN CASTELLÓ BRAVO: ¿SÓLO UN PINTOR?

Pintor y mosaista, Gastón Castelló fue hijo predilecto de Alicante, autor de una obra sólida y amable que reconstruyo el folklore, las fiestas y los tipos populares. Como escultor de hogueras, introdujo un decorativismo estilizado que conformaría el estilo alicantino vigente en las hogueras hasta los años cincuenta.

¡Grande, sí señor!
Gastón Castelló Bravo nació el día 3 de Noviembre de 1902 en el alicantino barrio de Benalua. Su padre era jefe mecánico en una fabrica de conservas llamada “Las palmas”. Desde muy pequeño sintió gran inclinación por el dibujo y se divertía dibujando a las mujeres que trabajaban en la fábrica. Un día acompañado de su padre viajó en diligencia a Alcoy (8 horas de viaje). Su progenitor cargado con sus dibujos quería presentarle al a amigo de su juventud, el ilustre pintor Don Fernando Cabrera. Le gustaron tanto sus dibujos que el maestro le dijo a su padre:
-¡Deja pasar algún tiempo y, aunque no admito alumnos, con tu hijo haré una excepción!.
A los diecisiete años iba a Alcoy 2 veces por semana para pintar bajo la tutela de Don Fernando Cabrera.
En 1921 Emilio Varela le invitó a exponer con él. La prensa decía: “Es un mocetón fornido que pinta igual que él es”.
En 1924 se trasladó por primera vez a la capital de España donde se enfrentó seriamente con la vida. Para subsistir trabajaba como dibujante en agencias de publicidad. Por la noche acudía alas clases gratuitas que se daban en el círculo de bellas artes que contaba con modelos vivientes. Cuando en 1928 le llegó la noticia del nacimiento en Alicante de las hogueras de San Juan, Gastón no lo duda un momento y regresa a su tierra natal, convencido de su capacidad para diseñar los nuevos monumentos de cartón.
Ya en Alicante forma parte de la hoguera de Benalua debido a dos razones: había nacido allí y porque su amigo Juan Such Roda figuraba en la comisión.
De esta forma surgieron escultoricamente personajes que irían sentados en el tranvía de Parada y Fonda (Benalua 1928). El resonante éxito de esta hoguera la hizo acreedora del primer premio de las hogueras de San Juan (dotada con 100 pesetas en plata de la época).
En los primeros años de las hogueras eran muy simples, Gastón las llamaba Naifs. Eran pequeños entarimados que introducían temas de la vida diaria de la gente humilde. Ese mismo año con fecha 24 de Junio se publicaba el ocúspulo de le fogueres de San Chuan. Que insertaban en sus páginas las hogueras plantadas sus lemas algunos versos y comentarios.
En 1930 Gastón se empeñaría en hacer una obra en solitario. Para ello realizaría un boceto titulado “Los Cinco sentidos de Alicante” y desarrolla una serie de innovaciones técnicas, pues sustituye la cera e introduciría el cartón modelado. Además abandona los vestidos de tela y en su lugar desarrolla los de papel y cartón.
Llego la Guerra Civil, los años de hambre y calamidades. Gastón estaba afiliado al sindicato de pintores de la U.G.T. Agobiado por la situación, marcha a Albacete, donde consigue un contrato en un circo actuando con el payaso Popy. Termina la guerra y regresa Alicante donde es encarcelado por su puesto de dibujante subversivo. Le condenan a 6 años y un día de los que cumplió año y medio, tiempo que aprovecho para plasmar cuanto se le presentaba a la vista. Desde 1941 hasta 1950 Gastón continuaría realizando hogueras. Posiblemente, nunca en el arte de las hogueras una obra tan concreta, haya tenido tanta influencia en su nacimiento y desarrollo como el conjunto de monumentos creados por Gastón Castelló entre 1928 y 1950. Unas hogueras que vieron la luz en diecisiete años diferentes y que se extienden a un total de 33 obras adultas cuatro de ellas realizadas en colaboración con otros artistas.
En 1956 fue llamado a presidir la Comisión Gestora en un intento de hacer salir a la fiesta del estancamiento en el que se encontraba. Durante su mandato se realizaron algunos cambios importantes. Aumento considerablemente el número de hogueras, se consiguió la inauguración de la “Casa del Foguerer”. Prestó gran atención a las barracas, hogueras infantiles, adorno de calles...
El 3 de Noviembre de 1979 es nombrado hijo predilecto de la ciudad de Alicante.
Fallece el 16 de Mayo de 1986 en la Clínica Vistahermosa. Un día antes de morir creó la que fue su última obra denominada “La Esperanza”.
ETERNAMENTE GASTÓN CASTELLO BRAVO.

 
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