28 mayo 2008

DONDE NACE EL SOL

Hoy es un día especial, y después de haber leído un artículo como el de Jesús de ayer, tenía ganas de compartir con vosotros otro momento especial y único que viví por unos instantes el sábado por la tarde, y que quise fotografiar, aunque fuera con la cámara de un móvil, para hacerlo eterno. Fue algo parecido a cuando topé con un arco iris gigantesco que abarcaba toda la ciudad...
¿Y qué tendrá que ver un atardecer con el "nacimiento del sol", es decir, con un amanecer?







El Principito. Antoine de Saint-Exupéry

Capítulo VI

Ah, principito ! así fui comprendiendo poco a poco tu pequeña vida melancólica. Por mucho tiempo no habías tenido por distracción más que la dulzura de las puestas de sol. Me enteré de este nuevo detalle el cuarto día a la mañana, cuando me dijiste:

- Me encantan las puestas de sol. Vamos a ver una puesta de sol...
- Pero hay que esperar...
- Esperar qué ?
- Esperar a que se ponga el sol.

Primero pareciste muy sorprendido, y luego te reíste de ti mismo. Y me dijiste:
- Siempre creo que estoy en casa !

En efecto. Cuando es el mediodía en Estados Unidos, el sol, como todo el mundo sabe, se pone en Francia. Bastaría poder ir a Francia en un minuto para asistir a la puesta del sol. Lamentablemente, Francia está demasiado alejada. Pero en tu planeta tan pequeño, te alcanzaba con correr tu silla algunos pasos. Y mirabas el crepúsculo cada vez que lo deseabas...

- Un día, vi al sol ponerse cuarenta y tres veces !

Y un poco más tarde agregabas:
- Sabes... cuando se está tan triste a uno le gustan las puestas de sol...
- El día de las cuarenta y tres veces estabas entonces muy triste ? Pero el principito no respondió.

Espectacular atardecer, visto desde el Barranco de las Ovejas, en San Gabriel.

El sábado 24 de Mayo, al atardecer, en Alicante pudimos ver un asombroso efecto de la luz del sol colándose entre las nubes con enormes franjas luminosas rectilíneas y alargadas. La fotografía no hace mucha justicia a lo allí presenciado, puesto que después fueron subdividiéndose, y convirtiéndose en todo un abanico de líneas rectas que iluminaban el cielo.


Este efecto, fue variando conforme pasaban los minutos y se movían las nubes. Los "rayos" salían rectos como autopistas de luz... de tal modo que cualquiera, al verlo, se sorprendía. Y fue entonces cuando recordé una imagen icónica de Japón, que en ocasiones se ha utilizado como equivalente a su bandera, llamada Hinomaru (que representa un disco solar), y en la actualidad lo utiliza la armada imperial y el ejército: un pictograma vinculado a su denominación del "país del sol naciente".
Esta expresión hace referencia a la etimología del nombre Japón en japonés, que es Nippon/Nihon 日本, cuyo significado literal es: "el origen del sol". Tiene origen chino: pinyin rì běn, Wade-Giles jih pen, "el oriente", "el lugar desde donde sale el sol", y se le conoce así desde hace siglos, puesto que es el país situado en el extremo oriental de Asia, en pleno océano pacífico.

Según los husos horarios internacionales, Japón es uno de los primeros lugares en recibir los rayos del sol de cada nuevo día... Y será casualidad o no, pero por la hora que ese día se puso el sol en Alicante (pasadas las 21h), allí en Japón, eran poco más de las 4 de la madrugada.
Aquí podemos comprobar la diferencia horaria entre ambos países, con nuestro horario de verano aplicado (GMT+2), que la hora de salida del sol en Tokyo estos días (sunrise time), es precisamente pasadas las 4 de la mañana...

Quizá el sábado, en Alicante, vivimos una escena similar a la que hace muchísimos años, alguien vio en la otra punta del planeta, cuando el sol amanecía, y con la que se sintió inspirado para hacer un dibujo que se convirtió en un icono de la cultura japonesa, mostrando el sol que nacía en su tierra...

Quizá..., sólo quizá...
Pero al menos, un atardecer tan singular como éste, podría hacer a alguien sentirse inspirado como para echar a volar la imaginación, y pensar, por un sólo instante, que Alicante acaba siendo la casa donde vive el sol, y donde la luz brilla tanto que inunda las calles y el cielo.
Si Alicante es el "levante", desde donde el viento Scirocco y el Xaloc traen el aire cálido y cargado de arena desde los desiertos de África, donde el sol besa al mar por las mañanas y nace desde el Mediterráneo por el Este, quizá ahora podamos pensar que hay algún vínculo que nos conecte con la tierra del sol naciente en el otro extremo del planeta.

Espero que os haya gustado esta pequeña locura de atardecer...

 
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