Según mi modesta opinión, el papa Ratzinger nos demuestra, una vez más, que vive en otro mundo. Porque, de lo contrario, no se comprende que vaya a un país africano donde la gente se muere de SIDA a millones y les advierta que usar condón es pecado. Los pobres viven en la miseria más espantosa, además del SIDA sufren hambre, viviendas miserables llenas de parásitos, horrorosas guerras tribales, una mortalidad infantil espeluznante, y viene ese señor tan pulcro, tan peinado y tan blanco a decirles que tampoco tienen derecho a disfrutar del sexo; que el condón es pecado y que si no quieren SIDA que permanezcan castos y puros. Pero, ¿no se da cuenta este hombre de lo que está haciendo? ¿No comprende que esa, precisamente, no es forma de respetar la vida? Wyoming, en su programa de televisión, ha puesto el dedo en la llaga parodiando un cartel de la Conferencia Episcopal en el que se compara la protección que se le da a un lince con el supuesto “desamparo” de un niño blanco ya crecidito; y nos ha mostrado otro cartel donde se ve un óvulo recién fecundado, con un letrerito que dice: “célula protegida”, y a su lado un niño negro, quizá ya contagiado, que exclama: “¿Y yo qué?”. Porque la Iglesia Católica, que tanto dice defender la vida, condenando el aborto y el condón, no mueve un dedo en contra de la pena de muerte, ni se inquieta por la suerte que van a correr los contagiados de África. Bueno…rectifico, seguramente rezará mucho por ellos. Que eso es gratis.
Hace unos días, un niño seleccionado genéticamente para curar a su hermanito ha cumplido las expectativas de los científicos y ahora los dos hermanos viven sanos y felices. Bueno, pues el portavoz de la Conferencia Episcopal condena el hecho porque dice que para obtener al niño curador ha habido que destruir varios embriones que, por cierto, ni siquiera estaban implantados en una matriz.
En fin, que la misma Iglesia que quemó a Giordano Bruno, encarceló a Galileo, inventó la Inquisición y apoyó a Franco, sigue haciéndole favores a la Humanidad.
En fin, que la misma Iglesia que quemó a Giordano Bruno, encarceló a Galileo, inventó la Inquisición y apoyó a Franco, sigue haciéndole favores a la Humanidad.
Miguel Ángel Pérez Oca.
(Leído en Radio Alicante el 24-3-2009)
(Leído en Radio Alicante el 24-3-2009)