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Publicado por Juan José Amores
Esta misma mañana, la Asociación Cultural Alicante Vivo ha solicitado a través del Registro General del Ayuntamiento por tercera ocasión en lo que llevamos de año, una propuesta para que el Consistorio de la ciudad rotule lo antes posible una calle para la gran arqueóloga sueca Dña. Solveig Nordstrom. Del mismo modo, a través del departamento de Alcaldía del Excmo. Ayuntamiento, hemos solicitado una reunión con la Alcaldesa de Alicante, Dña. Sonia Castedo Ramos, sobre el mismo tema, a fin de explicar a la Primera Edil quién es esta mujer y todo lo que representa para la Historia de nuestra ciudad. En dicha reunión, en caso de desarrollarse, los compañeros de nuestra Asociación harán entrega de toda cuanta documentación sobre la figura de Dña. Solveig sea necesaria para agilizar los trámites.
Dña. Solveig Nordstrom, “Sol” para sus amigos, es una de las grandes arqueólogas de la Historia de Alicante. Sin ánimos de olvidar o menospreciar a ninguna de las personas que han trabajado en los diferentes yacimientos arqueológicos de la provincia (Antonio de Valcarcel, Conde de Lumiares; José Belda; Francisco Figueras Pacheco; José Lafuente Vidal; o Vicente Martínez Morellá, entre otros), el corazón tiene que estar ahora con ella por muchos motivos, pero sobre todo por uno muy concreto: por HUMANIDAD. "Sol", nonagenaria, vive olvidada en un pequeño apartamento de Benidorm, con serios problemas y grandes dificultades de movimiento. En Alicante Vivo pensamos que los homenajes a las grandes personas de nuestra cultura, por muy humildes que sean, deben hacerse en vida, para poder ser escuchados por aquellos que dieron todo aquello que tenían en hacer grande esta ciudad. Desgraciadamente, ya hemos sido testigos de la inutilidad y escasa reperscusión de los homenajes póstumos que se han venido realizando a lo largo de los últimos años a grandes personalidades que fallecieron tiempo atrás. En el caso concreto de la Sra. Nordstrom, a pesar de ser merecedora de una gran calle junto al Museo Arqueológico de Alicante (en donde trabajó junto a su mentos D. José Lafuente Vidal), su delicado estado de salud nos lleva a solicitar cualquier calle de nuestra ciudad, sea cual sea, para evitar una mayor demora en los trámites. Estamos convencidos que se liberarán con frecuencia nuevas zonas de Alicante, producto del avance urbanmístico de la ciudad, que serían idóneas para nuestra solicitud.
"Al bajar del tren en la estación de Alicante, me compré por una peseta una bolsa enorme de dátiles. ¡Qué buenos estaban! Al caminar entre las palmeras, escuchando cómo me hablaba el viento entre sus hojas, hizo que me enamorara de esta tierra." (Solveig Nordstrom; Nov.2007)
Esta científica sueca, que un buen día se enamoró de Alicante, es uno de los personajes más grandes que tenemos. Sin duda alguna, debería tener un lugar de honor en la historia de la arqueología alicantina. Y no solamente por sus extraordinarios trabajos realizados en nuestra provincia como en la Albufera, San Fulgencio, Alcoy o Elche, sino también por su libro sobre la presencia cartaginesa en las costas alicantinas.
Sin embargo, los alicantinos nos hemos olvidado completamente de ella, o nos hemos limitado a ofrecerle un vacío y escueto homenaje en forma de placa a la entrada de Lucentum, las ruinas arqueológicas que ella excavó y salvó de la destrucción. Ahora vive en Benidorm, con casi 100 años, muy desgastada físicamente y en el umbral de la pobreza física. Apenas puede moverse y sufre un gran deterioro en las articulaciones de sus manos.
Solveig llegó a Alicante en diciembre de 1955. Licenciada en Historia y con unas dotes inusuales para el aprendizaje del lenguaje (habla y escribe a la perfección 14 idiomas), se disponía a realizar prácticas arqueológicas en nuestra provincia. Cinco años más tarde, en abril de 1960, ya era una trabajadora incansable en el yacimiento de Guardamar del Segura, uniéndose laboralmente al señor Lafuente Vidal, su gran mentor y amigo.
“Trabaja de forma incansable. En las excavaciones agarra la piqueta y no le rinden las horas. Resulta increíble. El entusiasmo la mantiene y su método de vida. No bebe ni fuma alimentándose única y exclusivamente de fruta y verduras, leche y alguna variedad de quesos”. (José Lafuente Vidal)
En el Museo Arqueológico Provincial (entonces en los bajos de la Diputación Provincial de Alicante) se mostró como una eficaz colaboradora de Lafuente Vidal.
“No es extraño que se lo sepa de memoria porque ha sido muy eficaz en su colaboración científica, donde ha llegado a redactar el plano del Museo, así como ha hecho muchos dibujos de orden explicativo y gráfico referido a los yacimientos arqueológicos de la provincia.” (José Lafuente Vidal)
En una entrevista realizada en el año 2007, contó entusiasmada a Alicante Vivo lo mucho que había podido descubrir en el yacimiento del Tossal de Manises, en una época en la que tan sólo se había excavado una octava parte de su perímetro (aprox.). Del mismo modo, nos contó lo mucho que se entristecía en la década de los años 60 cuando observaba el avance de las obras de urbanización masiva de la Albufereta y todo lo que se iba a perder de nuestro valioso patrimonio cultural si nadie lo evitaba.
“Los terrenos están vendiéndose por parcelas y sobre los mismos van construyéndose chalets, sin que mano alguna pueda detener esa anulación de valores que se hallan todavía sin descubrir (…) Claro, es cuestión de dinero y los arqueólogos somos pobres... ¡si yo pudiera hacer algo! (Solveig Nordstrom; artículo de D. Emilio Soler Pascual en el Diario Información de Alicante)
Diario 20 Minutos e Información, respectivamente
Su acción más valerosa y destacada tuvo lugar en un día sin determinar de principios de la década de los años 60 (Solveig no se acuerda de la fecha exacta y no es posible descubrir información en la prensa de la época por la censura reinante en la misma). Cuando las máquinas excavadoras de las empresas constructoras pretendían aplanar el Tossal de Manises, arramblando con los importantísimos restos arqueológicos depositados allí durante miles de años para construir un hotel, Solveig tuvo la valentía de enfrentarse a las autoridades franquistas de la época para impedirlo. Ni corta ni perezosa, se tumbó delante de los bulldozers y ante los medios de comunicación extranjeros que un amigo suyo (el abogado D. Jaime Pomares i Bernat) había avisado previamente, impidió con su actitud que los intereses especulativos arruinaran el santuario de las civilizaciones que por Alicante se habían establecido. Es seguro que, de no haber sido Solveig una ciudadana sueca, su actitud habría sido reprimida de forma inmediata por las autoridades, que prefirieron evitar un escándalo aún mayor del que ya se estaba produciendo.
Lo recuerdo como si fuera ayer. Estaba sentada en una piedra a la entrada del yacimiento del Tossal de Manises cuando escuché el sonido inconfundible de las excavadoras y buldozers. Era obvio que venían a destruir la maravillosa Lucentum para edificar viviendas. La primera de ella era conducida por un chico muy guapo. Cuando le pregunté que querían me respondió : "tenemos orden de quitar esta basura". Me quedé horrorizada. "No vais a hacer nada", le respondí yo. Discutimos acaloradamente y, al darme cuenta que iba a entrar dijera lo que dijese yo, me tiré al suelo delante de la excavadora. El chico se asustó y paró la máquina. Luego comenzó a llegar mucha gente: políticos, periodistas españoles... Pero mi gran amigo y abogado Jaime Pomares Bernat decidió avisar a las embajadas y a la prensa extranjera, que por entonces eran más independientes. Gracias a eso, pronto se declaró Monumento Histórico y nunca más lo tocaron.(Solveig Nordstrom; Nov.2007)
Después de esta paralización, Solveig consiguió que el Ministerio de Educación español comprara los terrenos sobre los que se asentaban los restos, impidiendo de este modo la desaparición de la ciudad íbero-cartaginesa-romana. Años después, ante la necesidad de conseguir dinero para sobrevivir (nunca cobró por sus trabajos de arqueología) Solveig Nordtröm se estableció en Benidorm, para ganarse la vida como bailarina. Actualmente desconocemos su situación exacta de salud, aunque colaboraba con el Grupo de Estudios Espíritistas Allan Kardec, siendo impulsora de la difusión de este movimiento en su país de origen.
De su dedicación y esfuerzo hemos encendido una luz a nuestro pasado y a nuestros orígenes. Solveig es historia viva... a pesar que nuestra ciudad se empeña en olvidarla. “Sol” es un empujón de vitalidad que nos alecciona en valentía e ilusión. Alguien dijo una vez que Solveig está hecha del mismo material con el que se tejen los sueños y las ilusiones. Y es cierto. Su historia lleva implícita grandes dosis de humanidad y filosofía de vida, que ciertamente, le han ayudado a alcanzar casi la centuria con una sonrisa en la cara. Solveig Nordstrom es, simplemente, alguien a quien siempre se debería recordar, no ya sólo por aprender de su espíritu y sus acciones, sino sobretodo, porque se merece ser eterna en nuestros ciudad.
ASOCIACIÓN CULTURAL ALICANTE VIVO
