Hablo de la calle que lleva su nombre, claro. Es una callecita de una sola manzana, que va desde la Avda de Jijona hasta la calle Valencia. Es muy estrecha, calculo que unos 3,80 m de ancho, llena de casas unifamiliares, la mayoría de dos plantas y sensiblemente paralela a la tapia norte del recinto de la Plaza de Toros, por lo que los testeros de las casas pares tienen el “honor” de compartir medianera con el patio de caballos y con los corrales de los propios toros.
Desde la misma Plaza de Toros como desde la Avda de Jijona / Plaza de España, el panorama caótico de medianeras, de la propia calle, así como de las traseras de las casas de la C/San Carlos, es el que se ve en las fotos: desolador y terrible. La antítesis de la estética que además aumentará sino se rectifica el P.G.O.U.
Pero es que lo mismo pasa con el resto de edificios que envuelven por 3 de sus lados a la Plaza de Toros. La diferencia es que en el lado sur, se ha proyectado una calle, que irá desde la plaza de España, hasta la del Hospital Viejo. Eso ocultará todas las medianeras.
En el lado norte, el nuevo P.G.O.U. prevé que se puedan levantar casas de 5 plantas en toda la longitud de la calle y 6 en las fachadas recayentes a la Avda de Jijona. Cinco plantas (unos 17 metros de alto), para una calle de 3,80 de ancho (que si permiten voladizos se verá sensiblemente reducida). Pero además las medianeras aumentarán de 7 m hasta los 17. Si se llega a edificar así, tendremos una calle angosta, oscura, insalubre y con una parte trasera, visible desde la plaza y desde la calle, más cochambrosa que ahora.
Con este aumento desmesurado de las alturas, se puede dar el caso, de que según las normas, los patios de luces interiores, deban ser más anchos que la propia calle...
Artículo publicado conjuntamente con Alacantí de profit