A VUELTAS CON LUCEROS

En febrero publicamos un pequeño articulo sobre la fuente de Luceros, ampliado meses mas tarde con mas datos, en él veíamos un montículo, tras la fuente, pero no pudimos confirmar si se trataba o no de la Muntanyeta del Raval de Sant Francesc.
El misterio quedó en el aire, aparentemente esa silueta piramidal no nos era familiar así que pensamos en la Montañeta, pero era difícil confirmarlo.
Y fue hoy, con el comentario de nuestro lector Francisco, cuando me acorde de la pequeña investigación que tenia pendiente de publicar para intentar aclarar el “enigma”…
Bien comencemos con la foto en cuestión:

En ella vemos la fuente en oblicuo, casi en un ángulo de 30º-40º, y a la derecha vemos la montaña con esa forma piramidal.
En principio también pensamos en el Monte del Tossal de San Fernando, pero la forma del Tossal es amesetada, y en cada extremo aparecería la Creu del Segle, a la izquierda y el Castillo de San Fernando a la derecha.
En esta foto vemos a la izq. la iglesia de Salesianos, actual esquina de C/ San Juan Bosco con C/ Tucuman y al fondo el Tossal en su ladera de San Blas, con la Creu del Segle coronando este extremo.
En esta otra foto se ve la silueta amesetada del Tossal desde la cara Norte de la fuente, con la avd. General Marvá y la construcción de las escalinatas del Jorge Juan.
Así pues por la forma, queda descartado que se trate del Monte Tossal, pero para confirmar que se trata de la Montañeta, analizaremos un ultimo detalle:
Entre los andamios hemos reconocido la figura que representa a Júpiter, una mujer con una palmera entre sus brazos que mira a poniente y hemos confirmado que es el lateral Oeste de la fuente, el que mira hacia la avenida de la Estación:

Así pues, el edificio del fondo seria la esquina con Alfonso el Sabio (la esquina próxima al hotel Covadonga) y esa montaña estaría detrás del Mercado Central, confirmando que ni es el Tossal de San Fernando ni la Muntañeta del Rabal de San Francisco, sino que se trataría de un Monte en las estribaciones del Benacantil, próximo a la zona donde se asienta el Rabal de San Antón, una silueta desconocida que en 1931, sin edificios altos ni túneles ni avenidas se presentaba de esta forma desde la misma fuente de Luceros.